«Tanto la filosofía, como la música y la poesía son cosas que me acompañan todos los días, me hacen ser quien soy.» (Lena Carrilero)

Lena Carrilero, cantante y compositora andaluza, continúa su carrera en solitario tras haber formado parte de Los Flacos. Lleva tres giras haciendo sonar la fuerza de sus letras, que son poesía pura acompañada de guitarra. Su última parada fue un concierto muy especial en la Sala Clamores de Madrid, pero por primera vez con banda incluida.

• Empezaste muy joven en la música. ¿Qué te llevó a ello?

Desde que tenía siete u ocho años quería aprender a tocar la guitarra eléctrica. Como no se recomendaba aprender directamente con ella, mi padre me compró una española y empecé a aprender por mi cuenta. Al final, con los años, dejé un poco de lado las ganas que tenía de tocar la eléctrica y terminé pasándome a la acústica, que fue la que me llevó principalmente a componer mis canciones.

• ¿Supiste desde el principio que querías dedicarte a la música como algo profesional? ¿Qué pensó tu familia al respecto?

No, yo creo que eso no se sabe. A no ser que hayas nacido en una familia de músicos y lo hayas visto desde pequeño, es algo que va poco a poco.

Yo no me he criado en un ambiente musical, mi padre tocaba un poco a la guitarra pero nadie de mi familia se dedicaba a la música. Realmente no sabía que esto iba a llegar a ser algo profesional, era algo que yo hacía en mi casa, por gusto y por pasarlo bien. Además, en Almería no se mueve mucho la música de autor así que nunca pensé que iba a llegar al punto en el que estoy ahora, dando conciertos y con gente allí, queriendo escucharme.

Dedicarme a la música no ha sido una decisión que me haya limitado a la hora de hacer otras cosas, yo he seguido con mis estudios y llevando una vida normal. Los últimos años sí que empecé a pensar en dedicarme a esto en serio, cuando me vi haciendo giras de 15 o 20 conciertos fue cuando me planteé que lo que realmente me pedía el cuerpo era la música. Pero claro, uno nunca sabe cómo va a terminar este tipo de cosas, así que yo compaginé los conciertos y la carrera, ya que tampoco me quitaba mucho tiempo. Es más, durante estos años creo que le he dedicado más a la música que a estudiar.

Mi familia me apoya en todo momento porque saben que estoy haciendo lo que realmente me gusta, y más ahora que ya he terminado la universidad y puedo hacer uso de la carrera en caso de necesitarlo.

• ¿Cómo fueron tus primeras actuaciones?

Mis comienzos, aunque no fueron muy relevantes, fueron en Almería. Empecé a cantar en el salón de actos de mi colegio: en las fiestas, a final de curso, en Navidad… Durante la ESO solía llevarme la guitarra y cantaba allí, delante de todos. Eso fue lo que hizo que me acostumbrara a cantar de cara al público.

Luego, cuando llegue a Sevilla, comencé a cantar los martes en un bar de cantautores que tenía micro abierto, La Estación, y allí fue donde me convertí en lo que ahora soy.

• Llevas ya tres giras, ¿te ha permitido la música conocer muchos lugares?

Realmente gracias a ella me conozco casi España entera, a excepción de parte del norte.  Cuando estuve viviendo en Italia también aproveché para tocar un poco, aunque solo me limité a  la ciudad en la que estaba.

Luego, cuando fui a estudiar a Argentina, toqué también por algunos lugares del sur  como Uruguay o Chile, ya con Los Flacos y Pedro Pastor. Me encanta poder viajar cantando y realmente es lo que me gustaría hacer toda mi vida.

Durante el tiempo que pasé en Sudamérica me sorprendió su forma de apreciar y respetar la música. No me quejo de nuestro país, pero aquí se entiende como un ocio, como una opción para pasar el fin de semana. En cambio allí conviven con ella a diario.

Por otro lado, noté que en España solo se valora a ciertos artistas, a los que tienen fama y un halo de superioridad y están respaldados por una discográfica. No se aprecia a los músicos callejeros, aun pudiendo ser mejores que esos que llenan estadios, algo que en Argentina no pasa.

• Estuviste durante un tiempo de gira con Fran Mariscal. ¿Cómo empezaron Los Flacos?

Fran y yo nos conocimos en el micro abierto al que yo iba en Sevilla. Él tocaba en un grupo de rock por aquel entonces, pero desarrollaba su faceta de cantautor en La Estación. Como a mí me gustaba mucho lo que él hacía, y a él le gustaba mucho lo que hacía yo, dijimos de juntarnos a tomar una cerveza y a cantar, y vimos cómo nos compenetrábamos muy bien. Tras varios conciertos juntos dijimos: “vamos a ponerle nombre a esto y a grabar un EP”, y como él es muy flaco y yo soy muy flaca pues no tuvimos que darle muchas vueltas al nombre. Creo que Fran es la persona con la que mejor me he entendido musicalmente. Somos muy buenos amigos y me ha encantado trabajar con él.

• ¿Te gustaría hacer otras colaboraciones con más artistas?

Hay muchos cantautores con los que me gustaría colaborar, pero con los que aún no he coincidido en ningún escenario. Por ejemplo, me encantaría actuar con Patricia Lázaro o Carmen Boza. Por otro lado, una espina que querría quitarme alguna vez en la vida sería Leiva. Sería algo increíble.

• Esta pregunta lleva trampa, ¿crees que “La cerveza” ha sido importante en tu vida?

Yo creo que sí, y en ambos sentidos. Fue el tema por el que la gente empezó a conocernos a Fran y a mí juntos, todo un boom. Realmente es una canción que para nosotros no tiene mucha relevancia, no es una de las más sentidas que tenemos, pero para la gente sí, y cuando acabamos un concierto con ella y vemos que el público se la sabe y la canta con nosotros nos da un gran subidón. Es muy bonito.

Y la cerveza en el otro sentido yo creo que siempre está, y más para los músicos, que prácticamente vivimos de noche. Saliendo con amigos, en un bar, de concierto… pero siempre está.

• ¿Te englobarías dentro de algún estilo musical? ¿qué otros artistas te inspiran?

Por la condición de llevar una guitarra, la voz y la temática de mis letras, me denominaría “cantautora”, pero sí que es verdad que cada vez hay más estilos dentro de este registro. Por ejemplo, no se pueden comparar a Alberto Alcalá que es más flamenco con Carmen Boza, que tira más para el rock o incluso el indie, y ambos son cantautores.

Yo siempre me había considerado de esa forma, pero ahora, tras probar con banda me he dado cuenta de que puede ser que tire más para pop o rock así que no sabría en qué género exacto definirme.

Me he inspirado en muchos artistas, pero sobre todo en cantautores, porque es lo que más tiempo llevo escuchando.  Me gusta mucho el estilo folk de Quique González, el sentimiento de Andrés Suarez… Voy cogiendo un poquito de aquí y allí. Haciendo un mix de todo.

• Acabas de terminar la carrera de filosofía. ¿crees que te ha servido para componer? ¿Qué suele inspirar tus canciones?

Tanto la filosofía, como la música y la poesía son cosas que me acompañan todos los días, me hacen ser quien soy.

La filosofía, más que ayudarme a la hora de componer, lo ha hecho en mi día a día, porque soy una persona muy filosófica y siempre me lo planteo mucho todo. Me ha enseñado a tener perspectiva, a ahondar en el lenguaje…

En mis canciones hay mucho de ella. Un ejemplo sería “Caída libre”, de la cual saco esta frase: “algún día entenderé que la suerte no es algo que merecemos. Que nos viene bien perder para darnos cuenta de lo que tenemos.”

Es una reflexión a la que quizás no hubiese llegado de estar estudiando otra cosa. La filosofía potencia que me pare a pensar y que esos pensamientos puedan convertirse en canciones.

A través de la música plasmo la parte más sentimental ya que la mayoría de mis canciones tratan de amor. O de desamor, mejor dicho. En mis canciones abordo algo que quizás no es tan importante, porque realmente de amor ni se vive, ni se muere. Usando la filosofía me centro en la parte más racional y reflexiva de mí misma. Y en la poesía, encuentro el equilibrio entre ambas.

•  Hace muy poquito que publicaste tu primer libro, Amores Cronofóbicos, con Valparaíso. ¿Qué nos contarías de la experiencia?

La verdad que no me lo creí hasta que pasó. Ahora ya lo tengo interiorizado, pero cuando me enteré que Valparaíso se había interesado por el libro fue uno de los días más felices de mi vida. Me lo leí la misma noche que llegó a mi casa. Estoy muy contenta con el resultado. La verdad es que no cambiaría nada de lo que está ahí. Son poemas de distintos momentos de mi vida, muy bien elegidos, y creo que todo lo que tiene que estar, está. Realmente espero seguir publicando más, porque escribir es una de las cosas que más me llenan en el mundo.

• ¿Cuál dirías que ha sido el mejor lugar en el que has tocado?

Sin ninguna duda el bar en el que comencé a cantar cuando llegué a Sevilla, La Estación. Sobre todo por la familiaridad que tenía con ese sito. Es un lugar muy especial para mí.

•  ¿Qué planes tienes para el futuro?

En principio grabar un disco para el cual voy a hacer un crowdfunding , y si este sale bien presentarlo en España a partir de marzo e irme luego a Sudamérica unos cinco meses a seguir promocionándolo allí.

• ¿Qué le dirías a todo aquel que quiere empezar en el mundo de la música?

Le diría que no piense en llegar a nada, que disfrute tocando. Lo que tiene que llegar llegará solo. Eso sí, se necesita mucho trabajo. No puedes intentar construir la casa por el tejado. Yo llevo tocando desde los ocho años y no empecé a tocar en bares hasta los diecisiete. Llevaba mucho de trabajo previo.

Lo importante es preocuparse de aprender bien y luego, de enseñárselo a la gente. Siempre hay algo que aprender o mejorar. Y a mí me queda aún muchísimo por delante. En definitiva, todo es ser crítico con uno mismo e ir paso a paso.

Desde la Clave de REC estamos seguras de que Lena Carrilero seguirá emocionándonos con sus canciones y haciéndonos bailar en la estación o en cualquier otra parte.

Paula Montes

Imágenes de Lena Carrilero y Verónica GB

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